sábado, 22 de mayo de 2021

Supertramp - ...Famous Last Words... (1982)

 

Como ya expliqué en el anterior post, la extensa y agotadora gira del exitosísimo Breakfast in America (1979) prácticamente acabó con el grupo, quien tras 5 años ininterrumpidos de grabar discos y girar decidió tomarse un merecido año de vacaciones. Pero aunque ese descanso era más que necesario para la salud mental de sus integrantes, a la práctica los acabaron distanciando más, ya que cada uno se montó su vida por su cuenta con sus respectivas familias rompiéndose así el sentimiento de comunidad en el que se había gestado su mejor obra, Crime of the Century (1974) - en ese aspecto Supertramp son tan poco enrollados que lo que destruyó al grupo no fueron las drogas, ¡sino sus familias! De modo que cuando tocó volver a reunirse para grabar su siguiente disco seguramente fue la primera vez que esa formación emprendió dicha labor sin muchas ilusiones y con una mentalidad más bien de "vuelta al cole". Es cierto que hay otro factor importantísimo que explica esa pereza, y es que su anterior álbum en estudio tuvo un éxito tan abrumador que la presión era altísima para que igualaran esa proeza, y si algo nos ha mostrado la historia del rock es que la mayoría de grupos suelen llevar muy mal ese tipo de situaciones.

Pero al margen de lo dura que fue la gira anterior, la realidad es que la relación entre sus dos líderes, Rick Davies y Roger Hodgson, no había hecho más que deteriorarse con los años y que a estas alturas las discrepancias entre ellos llegaron a un punto que amenazaba seriamente la estabilidad del grupo. De entrada Roger, principal responsable de Breakfast in America, dijo que habían llegado lo más lejos posible con esta formación y pidió a Rick que reemplazaran a los otros tres músicos por una banda nueva. Rick, por naturaleza mucho más comodón y conservador, se opuso totalmente. Aquí ambos tienen su parte de razón: entiendo que Roger quisiera probar a cambiar el sonido del grupo y también que Rick no le viera sentido a esa petición cuando les costó años encontrar una formación que funcionara tan bien como ésa.

No obstante reconozco que mirándolo en retrospectiva le doy más la razón a Rick que a Roger por dos motivos (sin entrar en el hecho de que me gusta mucho el sonido de la formación clásica del grupo): 1) cuando Roger grabó su primer disco en solitario años después sonaba a Supertramp por todos lados, ¿a qué viene esa insistencia en cambiar de formación para probar cosas nuevas si vas a acabar haciendo lo mismo? y 2) de cara a afrontar el nuevo disco de Supertramp Roger quería que siguieran el sonido pop de Breakfast mientras que Rick quería volver al sonido más progresivo de sus anteriores discos, es decir, el que pedía cambiar de formación para probar cosas nuevas es el que quería seguir la senda musical más conservadora; un poco raro, ¿no? - que conste que no insinúo que esta petición fuera un capricho de Roger, me creo que realmente pensara que hacía falta ese cambio en el grupo, simplemente creo que los hechos decantan más la balanza hacia la idea de que no habría servido de mucho. 

Con la ventaja que da el paso del tiempo creo que la opción más adecuada es la que le propusieron todos a Roger: que grabara un disco en solitario en el que probar cosas nuevas o incluir canciones que no encajaban en Supertramp y luego volver al grupo, de hecho le dijeron que estaban dispuestos a esperar a que él completara su álbum antes de ponerse de nuevo con Supertramp. Pero en realidad las discrepancias en el seno de la banda no eran solo musicales sino también personales. Por ejemplo, Roger se había ido a vivir a las montañas y dijo que se negaba a grabar el álbum en Los Angeles, aunque todos vivían allá. Hubo tantas peleas sobre esta cuestión que llegó un punto en que se planteó que se fuera del grupo antes siquiera de grabar el nuevo disco. Al final Rick fue a regañadientes junto al resto de la banda a grabar un tiempo allá pero enseguida se cansó y volvió a la ciudad. Roger también hizo lo mismo estando una temporada en Los Angeles pero no se sentía a gusto y no tardó en volver a la montaña con su familia. Y los otros tres miembros del grupo debieron sentirse como los hijos de un matrimonio que está en proceso de divorciarse, yendo de un lado a otro para grabar un disco que se tardó una eternidad en completar, no por el perfeccionismo innato del grupo como en ocasiones anteriores, sino porque los dos líderes estaban grabándolo casi por separado con cero interacción entre ellos (en la Wikipedia se citan diferentes versiones sobre cómo era la relación entre Rick y Roger en esa época, pero me parece muy significativa una en que uno de los implicados afirma que en toda la grabación jamás les vio dirigirse la palabra entre ellos salvo para darse indicaciones muy escuetas y esenciales sobre el proceso de grabación).

En medio de todo este follón estaba además la lucha de poder de Sue Davies, mujer de Rick, quien pasó de encargarse del merchandising a aspirar a hacerse con el control del grupo con el beneplácito de su marido. Sue era (y es) muy ambiciosa y, según los que han tratado con ella, de trato muy desagradable. Es una de esas personas de las que jamás he leído decir nada bueno a nadie... salvo a Rick, claro. Y precisamente en esa delicada situación lo último que necesitaba el grupo era alguien así haciendo sus movimientos para llegar al poder mientras los dos líderes de la banda discuten sobre dónde grabar el disco o el enfoque que debería tener la música. De modo que mucho me temo que aunque hubieran llegado a un acuerdo sobre los aspectos artísticos del grupo, la marcha de Roger era inevitable por otros factores, que incluyen desde la entrada en escena de Sue Davies a las ganas que tenía Roger de pasar más tiempo con sus dos hijos pequeños, algo que sabía que sería difícil si seguía en Supertramp, donde tampoco podía obligar al grupo a detener su actividad en vivo solo porque él no quisiera separarse de sus hijos (y en efecto, tras su primer disco en solitario Roger no haría ningún tour de promoción, a diferencia de sus excompañeros).

Así pues el grupo tuvo que afrontar este nuevo disco con los dos líderes más enfrentados que nunca y sabiendo que uno de ellos había querido deshacerse de casi toda la banda. Un ambiente más que propicio, ¿verdad? Lo curioso del caso es que aún conociendo todo este largo contexto, ...Famous Last Words... (1982) no es en absoluto un mal disco. De hecho la primera vez que lo escuché me sorprendió gratamente porque esperaba una obra mucho más floja. Sí, es obvio que es el menos bueno de los cinco discos clásicos del grupo, y aquí no creo que haya muchas voces discrepantes, pero realmente es un álbum notable; con pocos temas que realmente destaquen pero tampoco ninguno que sea malo, no destaca ni para bien ni para mal, mantiene un buen nivel medio sin ofrecer sorpresas.

Por entonces Rick, que siempre es a quien más le costó componer de los dos, tenía un buen arsenal de temas nuevos gracias al año de reposo que se habían dado, pero a la práctica parece que ni él ni Roger quisieron emplear en el disco buena parte de su mejor material sabiendo que sería su última obra juntos y que el siguiente disco les tocaría afrontarlo por separado. De modo que muchos de los temas ensayados para ...Famous Last Words... acabarían viendo la luz en In the Eye of the Storm (1984) de Roger y en Brother Where You Bound (1985) de Supertramp. Esto es algo que me resulta especialmente penoso en lo que se refiere a las composiciones de Rick, porque nunca he conseguido disfrutar de Brother Where You Bound por su producción ochentera, mientras que la de ...Famous Last Words... creo que aún mantenía el sonido Supertramp. La ausencia más dolorosa para mí fue de la canción "Brother Where You Bound" una ambiciosa composición de 15 minutos que era lo más arriesgado que había hecho el grupo hasta entonces e incluía algunos pasajes que no se parecían en nada a lo que era el sonido clásico de Supertramp (¿no querías probar cosas nuevas, Roger?). Desafortunadamente, aunque al propio Roger le parecía una de las mejores canciones de Rick, ambos decidieron que no encajaba en un disco que sería mayormente de temas cortos y accesibles. Para mí es justamente lo que le falta a este disco, un tema diferente y sorprendente que marcara la diferencia.

Curiosamente mis canciones favoritas del disco son la primera y la última, ambas de Roger. "Crazy" me parece un inicio de disco magnífico (por cierto qué bien solían empezar sus discos Supertramp), un tema 100% Supertramp pero sin sonar a refrito, con una buena melodía y pegadizo, que además usaron como inicio del tour de presentación del disco, sustituyendo a la hasta entonces irremplazable "School". Curiosamente a Roger no parece gustarle demasiado esta canción, hasta el punto de que es el único tema de los discos clásicos de Supertramp que jamás ha tocado en vivo en sus tours en solitario, o al menos así consta en Setlist.fm y yo jamás la he cazado en las cinco veces que he visto a Roger en directo - a modo de curiosidad los otros únicos temas de Roger que no he pillado de los discos clásicos en algún concierto son "Lady" e "If Everyone Was Listening", que sí los suele tocar de vez en cuando; "Just a Normal Day" no lo cuento porque es una composición a medias con Rick que se basa sobre todo en el dueto vocal, y curiosamente los dos temas acústicos de ...Famous Last Words..., que no son nada habituales, los pillé en un mismo concierto.

Mi tema predilecto del disco con diferencia es el último, la dramática balada "Don't Leave Me Now", que es el mejor cierre posible para la época clásica del grupo con una interpretación vocal soberbia de Roger acentuada por el saxofón de John Helliwell y el que creo que es el único solo de guitarra eléctrica en una composición suya de Supertramp (sin contar el segundo disco del grupo, donde los temas eran a medias con Rick). En cambio el gran single del disco, "It's Raining Again", es el tema que menos me gusta del álbum y una de las canciones que menos me agradan de Roger en Supertramp, y es raro porque es uno de los grandes clásicos del grupo. Pero la verdad es que aunque suena 100% a él para mí tiene un tono pop facilón que roza lo pachanguero, y me molesta el solo que hace aquí Helliwell, el típico solo de saxofón ochentero genérico que encontraréis en cualquier canción de la época, algo que me irrita especialmente cuando en las otras canciones no tiene ese sonido. No es un mal tema ni me desagrada, de hecho en un concierto de Roger me veréis cantarla con todo el mundo, pero siempre me la salto. Las otras dos contribuciones de Roger son dos temas acústicos que grabó prácticamente solo en su estudio, la intimista "Know Who You Are" y "C'est Le Bon", que están bastante bien, sobre todo la segunda.

Rick no sale tan bien parado en comparación, ya que aporta un tema menos que Roger y no tiene ninguno a la altura de sus dos mejores composiciones, pero como hemos dicho no es porque no tuviera más que contribuir (¡tenía la que potencialmente podría ser la canción principal del disco!) sino porque se estaba guardando muy astutamente canciones para el futuro (o porque no encajaban en el álbum, según la versión que prefiráis). De hecho tengo entendido que la actitud de Rick en el disco fue bastante pasota, supongo que lo vio como un trámite a cumplir hasta que Roger le dejara moverse a sus anchas en su siguiente obra. Una de las consecuencias de esa actitud es que, aunque se grabaron arreglos de cuerda para temas como "Bonnie" o "Waiting so Long" que todo el mundo asegura que engrandecían las canciones y que hacían recordar a los acompañamientos orquestales de Crime of the Century, Rick los descartó por motivos que nadie entendió jamás y se añadió esa parte con sintetizadores y teclados adicionales.

Pese a ello "Bonnie" es mi favorita de las composiciones de Rick en este disco y aunque quizá los arreglos la habrían engrandecido aún más sigo creyendo que es una composición muy especial que recupera una de las mejores facetas de Rick. "Waiting so Long" en cambio me resulta algo decepcionante: crea un clima de tensión interesante pero que luego no lleva a ninguna parte, uno esperaría algún giro inesperado de Rick marca de la casa, ese tipo de composiciones sin un estribillo obvio en que te lleva por caminos inesperados, y en lugar de eso uno descubre que la canción no va más lejos de su punto de partida. No está mal pero sabe a poco. Y por último en los temas más comerciales tenemos "My Kind of Lady", que salió como single y entiendo que es de esos temas que irrita a muchos por su aire pretendidamente retro-empalagoso como "Crocodrile Rock" de Elton John pero que a mí siempre me gustó mucho (además su videoclip es muy simpático), y "Put on your Old Brown Shoes", que está bastante bien y Rick rescató sorpresivamente en su última gira con Supertramp.

En circunstancias normales, ...Famous Last Words... resultaría una decepción en comparación con lo que el grupo nos había ofrecido hasta entonces pero si uno conoce el contexto hay que decir que el resultado es sorprendentemente notable. Por desgracia es inevitable pensar en lo que podría haber sido el disco de haberse grabado en unas circunstancias más favorables, pero qué quieren amigos, c'est la vie y aquí es donde se acaban los Supertramp clásicos.


2 comentarios:

  1. En esta época, 1982, yo ya no seguía a ST; yo estaba abducido por el Heavy Metal. No escuché el disco entero hasta el siglo XXI, y eso que siempre lo tuvieron mis primos de La Gomera.

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  2. Estupenda tu semblanza, Travis. Espero leerte más en este blog.

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