sábado, 8 de abril de 2017

Canned Heat - Woodstock '69




Cuando hace años (11 años ya, aish....) Canned Heat y Ten Years After giraron conjuntamente por aquí, utilizaron como gancho el nombre de "Woodstock Revival". Más allá de la maniobra comercial, el nombre era bastante pertinente, ya que son dos de las bandas por excelencia que consiguieron su mayor momento de popularidad con el famoso festival. De hecho, centrándonos en mis adorados Canned Heat, Woodstock fue el tramo final de su edad de oro.

Situémonos: formados a mediados de los 60, Canned Heat consiguieron su primer y merecido éxito en 1968 con su segundo disco Boogie with Canned Heat (1968), donde desplegaban su particular forma de interpretar el blues. También era el álbum en que se cerraba la formación clásica del grupo: Bob Hite a la voz, Alan Wilson a la voz y guitarra, Henry Vestine a la guitarra, Larry Taylor al bajo y, el nuevo fichaje, Fito de la Parra a la batería. Los tres discos que le siguieron fueron grandes éxitos de ventas confirmados por sus míticos conciertos, de ahí que tuviera sentido que se les ofreciera participar en el festival de Woodstock.



Pero, ay, solo unos días antes del concierto sucedió algo que pudo haber provocado que no actuaran en el que sería el momento más vistoso de su carrera: Henry Vestine dejó la banda tras una discusión con Larry Taylor. Las cosas se sucedieron muy rápido: la banda hizo una jam informal con los guitarristas Mike Bloomfield y Harvey Mandel, y le ofrecieron a ambos sustituir a Vestine. Mandel, que tenía por entonces una carrera en solitario, aceptó.

Antes de actuar en un festival tan multitudinario, la banda solo pudo hacer dos conciertos con su nuevo guitarrista. Fito, convencido de que no estaban preparados para actuar ante un público tan masivo estando tan verdes, se negó a ir y se encerró en su casa. Tuvo que ir el mánager del grupo hasta allá, colarse y convencerle. No se arrepentiría.



Pese a lo accidentado que fue todo, la actuación de Canned Heat en Woodstock fue absolutamente memorable, y es una pena que nunca se haya editado entera en disco. La banda salió a actuar al atardecer, como se puede comprobar mirando vídeos del festival: en las primeras canciones hay luz pero en el bis ya es de noche. Una de las mejores horas para actuar al aire libre.

Fito comentaba en su autobiografía que a la hora de preparar setlists solían ir muy por libre, seleccionando más versiones de blues que temas propios e ignorando a menudo sus hits. No obstante, en Woodstock parece que al ser un festival prefirieron ir sobre seguro y tuvieron el detalle de tocar dos de sus hits y un tema de estudio:

I'm Her Man
Going Up the Country
A Change Is Gonna Come / Leaving This Town
I Know My Baby
Woodstock Boogie

On the Road Again



Abren con una referencia a su último disco, el blues festivo "I'm Her Man" cantado por el entrañable Bob Hite. Al acabar, éste menciona lo espectacular que es todo ese despliegue de público, pero enseguida se encarga de quitar magnificencia a ese momento cuando añade a continuación "Solo tengo una cosa que decir... necesito ir a mear". Así era Bob.

Le sigue "Going Up the Country", que quedó como uno de los temas por excelencia asociados a Woodstock, ya que aparece la versión de estudio en el documental. Debo decir que me habría gustado que saliera la versión en directo, que mantiene la melodía pero con un toque más electrificado.

Aquí la banda decide lanzarse con sus versiones de blues. La primera la conocía porque es la que aparece en el documental de Woodstock. Fue mi primera toma de contacto visual con Canned Heat y recuerdo que me llamó mucho la atención las pintas de Bob Hite (haciendo honor a su apodo "el Oso" y vestido tan informalmente con una camisa gastada), así como uno de los momentos por excelencia de la película: cuando un espontáneo sube al escenario y Bob, en vez de evitarlo, se abraza a él y comparten juntos un cigarro.


No puedo decir mucho del siguiente, ya que la versión que circula por la red se oye fatal, así que salto a mi momento favorito del concierto: "Woodstock Boogie". En realidad es la clásica improvisación que Canned Heat hacían tras cada concierto que aquí se alarga hasta media hora. Merece destacarse la introducción de Alan Wilson a la guitarra, que me parece una maravilla. De hecho en general me gusta más este boogie que el que aparece oficialmente en el disco dos de Living the Blues (1968), que se me hace algo pesado, y eso que soy muy de jams.



Y como bis, otro hit, "On the Road Again", que en realidad lo cambian tanto que acaba siendo otro vehículo para desparramarse en improvisaciones blueseras. En las últimas ediciones en DVD del documental de Woodstock sale una grabación en vídeo de ésta.


¿Y qué sucedió tras Woodstock? Canned Heat editaron el mejor disco de su carrera con esta formación, esa obra maestra del blues-rock llamada Future Blues (1970), tras el cual hicieron una colaboración con John Lee Hooker y ahí se acabó su edad de oro. El insustituible Alan Wilson murió y tanto Taylor como Mandel dejaron el grupo. Por ello, Woodstock representa el tramo final de su edad de oro, fue su momento a nivel creativo y de popularidad, pero luego todo fue cuesta abajo.

Una pena, si algo demuestra esa actuación es que eran una de las mejores bandas de blues-rock del mundo.